Encontré el reloj el mismo día que quedamos en vernos. Lo abroché alrededor de mi muñeca izquierda, aunque yo no lleve reloj. Todo el mundo sabe que no llevo reloj. Dejé de usarlo cuando aprendí a saborear los minutos sin medirlos, sin cercarlos, sin encerrarlos bajo un tic tac de esfera sumergible. O quizás lo tiré cuando nos separamos y nunca más tuve valor para ponerme otro. No lo sé… ya no lo recuerdo.
Pero lo encontré y me lo puse, aunque haya dejado de ser hermoso. Él también se dio cuenta, los colores se han desgastado tanto que la correa ya es casi blanca. De un blanco sucio tintado de los recuerdos verdes y amarillos que un día fueron preciosos.
Cuando salí de allí, volví al regazo de mi barrio, a las sidras de la esquina, siempre las mismas desde hace tantos años. A los rostros familiares, a los abrazos amigos, a la complicidad de lo conocido, de lo cotidiano. Ch. nunca entiende porque me siento tan cómoda entre bloques y coches, no ve que hay días en los que aún puedo escuchar a la ciudad. Días en los que sé que ella me escucha a mí y sigue siendo capaz de comprenderme.
Eché un vistazo a la correa, tal vez él tenga razón y debiera cambiarla. Me lo quité pensando en el abrazo -también desgastado- que nos dimos, como si los colores no hubieran desaparecido nunca. E. me pegó con una revista “baja de las nubes nena”. Y lo hice, aunque no sin antes guardarme unas cuantas en los calcetines.
Hay personas que nunca se van y colores que siempre permanecen vivos.

7 a los que les dio por decir que...:

los colores deben quedarse, siempre. hay personas que tienen que irse...

10:29 a. m.  

los colores se quedan, las personas pasan, pero al final solo perdura lo unico q nunca se marcha. ¿no lo escuchas? es el silencio, roto alguna vez por una cancion o una risa o un llanto pero siempre reaparece clabandose en el alma

1:40 p. m.  

Querida oruga sabia, querido jota:
Los colores que permanecen son los que iluminan los rostros de mis amigas del barrio.
Hay otras personas que, efectivamente, tienen que irse.

9:01 a. m.  

Es cierto no te comento apenas, pero te leo a menudo, aunque no tenga internet en casa. Lo cierto es que la mayor parte de las veces creo que poco se puede añadir a lo que tú ya has dicho

1:21 p. m.  

Siempre nos queda un poquito de los que se van no crees?, un color, un olor, una palabra....
Qué chuli tu blog!!!
Un besín

1:29 p. m.  

Tienes razón, no entiendo casi nada...
Creo que yo, me olvidé la caja de colores en algún sitio hace ya algún tiempo, y me llevé en la mochila algo/alguien de quien estoy a punto de deshacerme..Por fin.
En todo caso, siento desasosiego, essstréssss existencial y seguramente tengo miedo...
Para ser yo no está mal esta confesión pública de humanidad, como tú me dijiste esta mañana...!

5:16 p. m.  

le pones los cuernos (figuradamente) a tu blog con tu fotolog... lo tienes abandonadito!

10:06 p. m.  

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio